Reflexiones FIL y Liber 2011

Después de un año más en FIL me he preguntado con varios amigos de la industria por qué FIL no es Liber. Aquí solo tienes cuatro o cinco reflexiones, las más evidentes, pero que no creo que debamos pasar por alto.

1. FIL siempre es en la misma ciudad, que se vuelca con el evento. Liber es bicéfala repartiendo el evento entre Madrid y Barcelona. Esto hace que no se consolide un proyecto en ninguna de las dos ciudades.

2. FIL permite que el público asista y pueda comprar, conocer a los autores y editores, pasear y participar como el gran invitado a la fiesta del libro. LIBER no solo no permite que participen los lectores, sino que prepara toda la agenda pensando en el editor, pretende ser la fiesta del libro pero no permite la implicación del invitado más importante, el lector. Y no solo eso, además dedica un gran espacio para los niños, sin los cuales no tendremos futuro ninguno de los editores del mundo.

3. FIL cuenta con la asistencia de todos los editores nacionales y muchos extranjeros. A LIBER no solo no asisten los editores, sino que mandan en el mejor de sus casos a los directores comerciales. Como me decía un amigo "tiene más glamour estar en FIL, muchas cenas y paseos por México". Hay editores españoles que no van a Liber por años.

4. En FIL los Hoteles, taxis, aviones, etc... respiran la Feria del Libro. Con LIBER ni Barcelona ni Madrid se enteran que tenemos una feria del libro.

5. A FIL no solo van editoriales, también asisten las principales librerías de México, y miles de libreros van a conocer las novedades y a comprar con descuentos especiales. Si en LIBER se plantea la posibilidad de vender al público, las librerías se echan encima de los editores y amenazan con boicotear sus publicaciones, pero curiosamente se cuentan con los dedos de una mano los libreros que participan en LIBER.

Podría seguir, pero entonces te aburriría y no leerías esta reflexión.

Creo que Liber está acabado si no decide sentar a los editores en una mesa con los libreros y distribuidores y empieza a repensar lo que queremos que sea la Feria Internacional del Libro en España. Sin contar con todos los agentes que participan en la industria estamos condenados a la desaparición, pero parece que esto importa más bien poco.

Lamentable.

Hoy he sido un poco más pesimista y duro, pero no te equivoques, apuesto por el libro y por un proyecto que me apasiona, aunque parece que el futuro está muy lejos de nuestra querida península Ibérica...