lunes, 14 de enero de 2013

Los nuevos y viejos modelos de distribución


A falta de recibir los números de ventas en el mes de enero, con las correspondientes devoluciones, y después de un mes de diciembre “atípico” según nuestro distribuidor  en España (eufemismos a parte, ha sido un mes terriblemente malo para el sector), las editoriales empezamos a preparar las liquidaciones para nuestros autores.

Desde hace varios años hemos ido viendo como cada vez es más frecuente que los autores se impliquen cada vez de una forma más activa y comprometida con la venta de sus libros, incluso con su distribución me atrevería a decir.

Este año los mejores resultados de ventas los van a obtener los autores que no solo se han comprometido con sus obras promoviéndolas en colaboración con la editorial y las librerías y distribuidora, sino que además los que han destacado de una forma especial son aquellos que han implementado nuevos (o más bien viejos) modelos de distribución y venta con sus libros.

Llevamos un tiempo observando como cada vez son más los autores que comprar una cantidad de libros elevada con unas condiciones especiales, que quedan reflejadas en sus contratos de derechos, y planifican una serie de eventos al año en los que dan salida a esos libros, multiplicando los beneficios que obtienen por los royalties de ventas.

Y si el autor es un profesional de la psicología o pedagogía estás practicas se multiplican ya que tienen muchas más oportunidades de dar salida a sus publicaciones, con la asistencia de un publico predispuesto a adquirir dichas publicaciones.

Comentaba hace un momento que estos modelos empiezan a darse con más frecuencia (y no es porque sean una novedad, más bien es todo lo contrario) debido a varias razones interesantes.

1.     La dificultad que muchas veces tienen sus lectores para encontrar las obras, sobre todo las que ya tienen algún tiempo. A pesar de que en las webs de las editoriales pueden encontrarse aun si no están ya en el catálogo del distribuidor.
2.     La oportunidad de la venta por impulso. Si el profesional, conferenciante, docente, etc,  es buen comunicador se crea un ambiente propicio para la venta, y los números que se obtienen no son nada despreciables.
3.     El beneficio que obtienen es mucho mayor, lo que hace que cada vez se multipliquen este tipo de eventos organizados directamente por los autores.

Estas son solo tres razones, seguro que hay más, que nos muestran como muchos autores están empezando a viajar con una maleta de libros, como se hacía años atrás, y esto cada vez les da más beneficios y más repercusión.

En muchas ocasiones estas mesas de libros están atendidas por librerías o por la misma distribuidora, lo que nos indica que ambos agentes en la cadena de suministro del libro han visto que estas acciones son cada vez más atractivas para mejorar los resultados en cada liquidación.

Y es que si cada vez las novedades aguantan menos en las librerías por la celeridad en la rotación, estas acciones dan salida a libros que de otra manera se quedarían en los almacenes de las distribuidoras y las librerías.

En estos tiempos en los que la tecnología cada vez nos ofrece más y diferentes posibilidades de acceder a la información y a las publicaciones, el contacto directo con el autor en su “hábitat natural” facilita mucho las ventas, lo que nos debe hacer pensar en la posibilidad de crear nuevos modelos de distribución y ventas, cada vez creados más a medida de los autores y temáticas y apuntando directamente a las comunidades que se crean alrededor de ambos.

Pensemos pues. 

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